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El marino italiano al servicio de España, Alejandro Malaspina, realizó una de las grandes expediciones científicas de la Ilustración del siglo XVIII.
Nació el 5 de noviembre de 1754 en Mulazzo (Italia), estudió en Roma y en España, y en 1774 se graduó en la Escuela de Guardiamarinas de Cádiz. Participó en diversas acciones de guerra y en largas navegaciones. Y en septiembre de 1788, presentó a Carlos III su proyecto de expedición científica, que fue aprobado.
Siendo capitán de navío, en julio de 1789 zarpó al mando de la escuadrilla formada por las corbetas Descubierta y Atrevida, construidas para la expedición, llevando como segundo al también capitán de navío José Bustamante y Guerra. Recorrieron las costas orientales de Sudamérica, las occidentales del continente americano, muchas islas del Pacífico, y entraron de regreso en Cádiz en septiembre de 1794. El enorme trabajo realizado se materializó en una gran colección de datos, especies botánicas, minerales, utensilios, trajes, herramientas, objetos de todo tipo, dibujos y más de 70 cartas náuticas.
A su regreso reinaba Carlos IV y ostentaba el poder Godoy, que acusó a Malaspina de conspirador, condenándolo en 1796 a 10 años de prisión en el castillo de San Antón de La Coruña. Liberado en 1803 a instancias de Napoleón y desterrado a Italia, murió en Pontremoli en abril de 1810.
El Museo Naval de Madrid, además de dos retratos del marino, conserva una gran cantidad de obras gráficas realizadas por los dibujantes y pintores que participaron en la expedición.
Marcelino González Fernández
