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Eduardo Martínez Viqueira ingresa en la Real Academia de Doctores de España

Leyó su discurso de ingreso el 11 de enero de 2023

Bajo la presidencia de Antonio Bascones Martínez, presidente de dicha Academia, al que acompañaban en la mesa presidencial, Jaime Domínguez Buj, general de Ejército y presidente de la Academia de las Ciencias y las Artes Militares (ACAMI), José Manuel Cuenca Toribio, académico numerario que pronuncio la laudatio del recipiendario, Emilio de Diego García, académico numerario y director de la tesis doctoral del nuevo académico y, por supuesto, el último citado. 

La sala (Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla) completó su aforo, teniendo que añadirse a última hora nuevas sillas por los pasillos laterales y hubo personas que escucharon las intervenciones de pie.

En primer lugar, dio la bienvenida al acto el presidente de la Academia que cedió la palabra al doctor Cuenca Toribio para que pronunciase la laudatio del nuevo académico. A continuación, leyó su discurso el general Martínez Viqueira cuyo resumen adjuntamos. Enseguida tomó la palabra el doctor De Diego que resaltó los méritos de la tesis doctoral del nuevo académico. Tras la imposición de la medalla de la Corporación y la entrega del diploma acreditativo, tomó de nuevo la palabra el presidente de la RADE que dedicó unas palabras de elogio y de ánimo al presidente de la ACAMI y terminó clausurando la sesión.

La ACAMI se congratula de ver a uno de sus académicos sentado en tan insigne Academia y, por ello, lo felicita efusivamente.

Resumen del discurso de Eduardo Isidro Martínez Viqueira

Desde la guerra de Independencia se planteó en España un modelo de seguridad basado en una organización policial civil a la que se subordinaba un cuerpo militar, pero todos los intentos fracasaron. En 1844, superada la etapa de conflictos, se partió del mismo diseño; pero el cuerpo militar, la recién creada Guardia Civil, tuvo su propio desarrollo, mientras que la Policía se mantuvo por largo tiempo a nivel provincial, sin un cuerpo estatal reconocible. Por ello, el modelo de seguridad pública del Estado liberal moderno se inició con la Guardia Civil y se desarrolló hasta las primeras décadas del siglo XX con la Benemérita como columna vertebral de todo el sistema, elemento clave para la vertebración e integración del territorio, y para un modelo administrativo de Estado centralizado. Progresivamente, ese modelo fue complementado por la Policía en las ciudades, y en particular, desde su definitiva corporativización y dimensión nacional durante la Restauración y los primeros años del siglo XX. 


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